El índice Big Mac

Mike se acerca a un Mc Donalds del centro de Varsovia (capital de Polonia) y pide un Big Mac. Al pagar y hacer mentalmente el cambio de zlotys a dólares […]

Mike se acerca a un Mc Donalds del centro de Varsovia (capital de Polonia) y pide un Big Mac. Al pagar y hacer mentalmente el cambio de zlotys a dólares se sorprende de lo barato que le ha salido. 2,50 dólares es mucho menos que los 4 dólares que está acostumbrado a pagar en Nueva York (EEUU). Encontrar la hamburguesa más popular de Mc Donalds no es difícil, vivas donde vivas. Es por ello que desde 1986, The Economist usa el Big Mac como herramienta para medir el poder adquisitivo y los tipos de cambio en todo el mundo.

Cuando viajamos y compramos productos en países con monedas diferentes, necesitamos convertir el precio en moneda local a la moneda de nuestro país. Para realizar este cambio se usa el tipo de cambio, una referencia sin la cual sería imposible saber si el dependiente que nos quiere vender un imán para la nevera por 1000 yenes nos quiere estafar o no.

Los tipos de cambio suelen ser variables, es decir, fluctúan en el mercado y su valor depende de la oferta y la demanda de esa moneda. En ocasiones un gobierno (a través de su banco central) modifica el valor de su moneda apreciándola o depreciándola dependiendo de la situación económica. En muchos casos esto provoca un desequilibrio que hace que una moneda no esté correctamente valorada. El índice Big Mac se creó como un método sencillo para mostrar esas desviaciones. Sin embargo, esto casi nunca ocurre. Y justamente estas diferencias relativas de precios son las que le permiten a The Economist dar pistas sobre qué tan subvaluadas o sobrevaluadas están las diferentes divisas.

• Hay casos de países en los que el costo del Big Mac (medido en dólares) es más alto que en Estados Unidos. Esto da indicios de una moneda apreciada y de una nación con riesgos de devaluación.

• Por el contrario, si la hamburguesa está más barata, esto estaría marcando la presencia de un territorio con su moneda debilitada y que está consumiendo por debajo de sus posibilidades.

Ejemplo:

  • Si comparamos por ejemplo el precio medio de un Big Mac en EEUU (3,57 dólares estadounidenses) con el de Nueva Zelanda (4,92 dólares neozelandeses), podríamos suponer que ya que nos encontramos ante el mismo producto, el tipo de cambio correcto entre estas dos divisas sería 3,57USD/4,92NZD = 1,38.
  • Esa cifra debería coincidir con el tipo de cambio real entre el dólar estadounidense (USD) y el dólar neozelandés (NZD), que es 1,23.
  • Sorprendentemente no corresponde, con lo que se deduce que el tipo de cambio tiene una pequeña desviación. En este caso (1,23-1,38)/1,38 = -0,1087, lo que significa que el tipo de cambio entre el USD y el NZD está infravalorado en un 10,87%.
  • Curiosamente es una hamburguesa y no otro tipo de herramientas financieras complejas lo que nos da la clave en cuanto a los tipos de cambio.

El índice basa su sistema en la teoría de la paridad del poder adquisitivo (PPA), que sostiene el concepto de que el dólar debe comprar la misma cantidad de bienes o servicios en todos los países. Por lo cual, este índice se usa sobre todo para calcular esta paridad de poder adquisitivo de los ciudadanos de varios países. Por ejemplo, para medir el poder adquisitivo entre dos países cualquiera, se necesitan referencias de precios y salarios reales de ambos. De esta manera, sabiendo que en el país A, con un salario de 1000, una hamburguesa cuesta 1; y en el país B, con un salario de 800, una hamburguesa cuesta 2; podemos concluir que el poder adquisitivo de los habitantes del país A es mayor que los del país B, o dicho de otro modo, el ciudadano de A, puede comprar más unidades de ese bien con el mismo dinero.

Para calcularlo se usa una cesta de bienes y servicios estándar con un país de referencia. En esa cesta se calcula el valor de esos bienes en una moneda común (generalmente el dólar) y se compara con el de otros países. Pero en ocasiones, los bienes seleccionados no se encuentran disponibles en algunos sitios, con lo que el resultado de la medición sería poco aproximado a la realidad. Para solventar ese problema, The Economist decidió sustituir los bienes de la cesta por uno solo, el Big Mac de Mc Donalds, algo que se puede encontrar en casi todos los países del mundo. Después de comparar el precio de este bien en diferentes lugares, podemos dar respuesta a una pregunta: ¿Cuántas hamburguesas se pueden comprar en un país determinado con 50 dólares estadounidenses?

En EEUU podemos comprar unas 11, que contrasta con las 30 que podríamos comprar en India o las solo 7 que adquiriríamos en Noruega. Con esta simple conversión, podemos hacernos una idea de la diferencia de precios del mismo producto en diferentes países.

Pero el número de hamburguesas que podemos comprar con 50 USD no nos da una idea de la capacidad de compra de los países, ya que el tiempo que le lleva a un trabajador ganar esos 50 USD varía de un país a otro. Para ello, y usando el mismo índice, se calcula el número de hamburguesas que se pueden comprar con una hora de trabajo. Así pues, un canadiense podría adquirir 2,2 Big Macs con una hora de trabajo. En cambio con esa misma hora, a un chino ni siquiera le llega para una, solo un 0,6. Esto ocurre porque pese a que el precio de una hamburguesa en Canadá es de unos 4,63 USD y en China 2,44 USD, los salarios del primero son mucho más altos que el segundo, y respecto al nivel de precios, un ciudadano canadiense tiene mayor poder adquisitivo que uno chino.

No obstante este sistema tiene algunas limitaciones que pueden influir negativamente en los resultados. La diferencia de precio del Big Mac en algunos países puede ser debida a otros factores que no se tienen en cuenta en estos estudios, como la popularidad del producto, las acciones de marketing local que lleva a cabo la empresa o incluso el uso de un margen de beneficio diferente. Otro problema deriva del posible uso fraudulento del precio de este bien por parte de los gobiernos. Si un país necesita camuflar por ejemplo una alta tasa de inflación, podría subvencionar las hamburguesas Big Mac para que el precio de estas sea más bajo en comparación a productos alimentarios similares, como ocurre en Argentina como veremos más adelante.

Sin embargo el índice Big Mac, con todas sus deficiencias, ha demostrado ser una herramienta lo suficientemente fiable y sencilla para extraer conclusiones de la economía real de los países.

El Índice Big Mac en Argentina

Primero, porque el ex secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, presionó sobre la cadena McDonald’s para que ésta mantuviera un precio artificialmente bajo, de manera de evitar que -en la difusión de la estadística a nivel mundial- el país apareciera demasiado «caro en dólares» aparte de obligarle a la cadena no publicar el precio del Big Mac. Lo cual es fácilmente constatable ya que en todos los locales argentinos, el único producto que no esta publicitado es el Big Mac. Del lado de la cadena dicen que no tienen lugar. ¿Qué raro no? La hamburguesa más famosa del mundo no esta publicitada.

Lo cierto es que surgieron dudas respecto de los criterios del precio de esta hamburguesa, lo cual llevó a The Economist a suspender la información sobre la Argentina en su ranking.

¿Cómo se calcula?

Por ejemplo vamos a calcularlo para Argentina con lo valores de Mayo del 2014.

1 Combo Big Mac (EEUU) = u$s 4,62

1 Dólar (Precio Oficial – Mayo 2014) (Arg.) = $ 8,01

1 Combo Big Mac (Arg) = $ 44

1 Combo Cuarto de Libra (Arg) = $ 66

Big Mac sola (Arg) = $ 21

Triple Mac sola (Oferta del Mes) (Arg)= $ 22

Ya de arranque notamos algo raro. La oferta del mes es más cara ($ 1) que la  Big Mac sola, lo cual nos demuestra el nivel de subvención que tiene esta hamburguesa. Además, podemos observar que el combo cuarto de libra cuesta $ 22 más, aunque es un combo de similares características que el del Big Mac.

Ahora vamos al calculo. Con el valor de una Big Mac en la moneda de Argentina  y el valor de esa misma hamburguesa en dólares americanos (US), se obtiene la tasa de cambio de la paridad del poder adquisitivo. Es decir,

PPA= Precio Combo Big Mac (Arg) / Precio Combo Big Mac (EEUU) = $ 44 / u$s 4,62 = 9,82 $/u$s

O sea, que este índice nos dice que el dólar en Argentina tendría que costar 9,82 $. Lo cual significa que la moneda argentina esta subvaluada en $ 1,81. Esto resulta de realizar la siguiente resta:

Tasa Dólar – PPA = $ 8,01 – $ 9,82 = $ -1,81

En otras palabras, un -22,82 %, resultantes de hacer:  (Tasa Dólar – PPA) / Tasa Dólar = ($ 8,01 – $ 9,82) / $ 8,01  = -22,82 %

Lo cual nos pone al lado de economías como, la de México, China, Rusia, Arabia Saudita o Pakistán. Países con sus monedas medianamente subvaluadas.

Pero tenemos que tener en cuenta que este valor no es el real, ya que el precio del Combo Big Mac esta subvencionado. De todas formas, varios economistas «descubrieron» que el cálculo puede hacerse con valores casi iguales a los del «Big Mac libre» si se sustituye la hamburguesa, que aún presenta su precio «congelado» a pesar de la salida de Moreno. Es por esto que se realiza el mismo estudio pero sobre el costo de otra hamburguesa de la cadena americana, por ejemplo, el «Cuarto de Libra».

PPA= Precio Combo Cuarto de Libra (Arg) / Precio Combo Big Mac (EEUU) = $ 66 / u$s 4,62 = 14,28 $/u$s

Tasa Dolar – PPA = $ 8,01 – $ 14,28 = $ -6,27

(Tasa Dólar – PPA) / Tasa Dólar = ($ 8,01 – $ 14,28) / $ 8,01  =  – 78,27%

Ahora con los valores reales (sin subvención) obtenemos que la tasa de cambio del dólar debería estar a 14,28 $/u$s y que nuestra moneda esta subvaluada realmente en un – 78,27%.

Lo cual nos pone al lado de economías como, la de India, Indonesia, Sudáfrica, Malasia o Ucrania. Países con sus monedas más subvaluadas.

Mi intención no es hacer ningún juicio de valor. Eso lo dejo para el lector. Sólo me remito a calcular lo real. Y esto nos deja un dilema: ¿el fin justifica los medios?, como decía Maquiavelo y tapamos el sol con las manos y no difundimos la realidad de lo que esta sucediendo hacía el mercado internacional  o se trata de una estrategia para tapar la realidad a todos los argentinos.

Link del Diario The Economist:  http://www.economist.com/content/big-mac-index

Video explicando la realidad Argentina narrada desde el exterior:

¿Qué otros índices curiosos existen para medir la economía?

El éxito del índice Big Mac ha sido no sólo convertirse en una herramienta estudiada y aceptada masivamente, sino también en crear escuela. Por ejemplo:

  • Tall Latte: The Economist usó en 2004 una taza de café de Starbucks para medir exactamente lo mismo, la supuesta paridad del poder adquisitivo.
  • Índice iPod: Creado en Australia, usaba el iPod por estar fabricado en un mismo lugar, en vez de en muchos diferentes como ocurre con los Big Mac.
  • El índice Billy: Bloomberg, otro medio especializado en información económica, uso el precio del modelo Billy de estanterías de Ikea en 38 países para comprobar que era muchísimo más caro comprarla en Israel que en Emiratos Árabes (más de 50 dólares más), ejemplificando también que la teoría de la paridad del poder adquisitivo es justo sólo eso: una teoría.
  • La barra Mars: En Inglaterra, el Financial Times consideró a las barras de chocolate Mars como la mejor manera de comprobar los cambios que habían experimentado los precios y la estabilidad de la libra desde la Segunda Guerra Mundial hasta nuestros días.